La organización latina de derechos civiles más antigua y más grande del país dice que el destino de Cecily Aguilar ayuda a la comunidad a sanar y puede proteger a otros miembros del servicio militar.
Washington, DC – La Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC) dijo que la sentencia de 30 años de Cecily Aguilar en relación con el brutal asesinato de la especialista del ejército Vanessa Guillén en 2022 finalmente pone fin a una fase crucial de la justicia. “Nada reemplazará el dolor y la pérdida que ha sufrido la familia Guillén por el trágico asesinato de Vanessa”, dijo Domingo García, Presidente Nacional de LULAC. “Lo que representa esta sentencia es una victoria de nuestra comunidad unida y viendo este proceso hasta su final. Debido a la lucha que emprendimos después de la muerte de Vanessa, LULAC puede decir que tenemos la Ley Vanessa Guillén que protegerá a generaciones de otros miembros del servicio de caer víctima de agresión sexual militar o algo peor. Es un momento agridulce“
En noviembre, Aguilar se declaró culpable de un cargo de cómplice y tres cargos de hacer declaraciones falsas. Enfrentó una sentencia máxima de 30 años y una multa de $1 millón. Aguilar es la única persona acusada del asesinato de Vanessa. Anteriormente admitió haber ayudado a su novio, Aaron Robinson, a desmembrar el cuerpo de Vanessa antes de enterrar sus restos en tumbas poco profundas a lo largo del río León. El presunto asesino de Guillén, Robinson, se suicidó antes de que se encontrara su cuerpo. Los documentos judiciales dicen que Robinson le dijo a Aguilar que “golpeó” repetidamente a Vanessa en la cabeza con un martillo en Fort Hood y que ella murió a causa de las heridas. Los documentos dicen que escondió su cuerpo en una caja grande, que él y Aguilar luego intentaron desmembrar y quemar.
“No hay ganadores en esta historia”, dice Analuisa Tapia, la líder de LULAC que organizó vigilias de protesta comunitaria en las afueras de Ft. Cavazos todos los viernes durante semanas mientras el Ejército guardaba silencio sobre la desaparición de Vanessa en abril de 2022. Sus restos fueron encontrados el 30 de junio, dos meses después. “Lo que hemos estado buscando no es venganza sino justicia para que esto nunca vuelva a suceder, como lo que pasó Vanessa. Ella fue víctima varias veces porque el Ejército no la protegió ni escuchó las súplicas de ayuda de su familia cuando Vanessa desapareció. “Incluso dijo que estaba desaparecida sin autorización o sin permiso. Quizás ahora podamos comenzar a dejar que Vanessa descanse en paz y poder que su muerte nos haya llevado a un lugar mejor para los demás”, manifestó Tapia.
La Ley Vanessa Guillén es la ley que pasa por alto a los comandantes al exigirles que soliciten investigaciones independientes dentro de las 72 horas posteriores a la recepción de la denuncia y que la remitan a la siguiente oficina superior en la cadena de mando. Este acto va más allá de atender el delito primario y profundiza en el daño secundario de la represalia contra la persona que presenta la denuncia inicial de un delito relacionado con el sexo. Las represalias se han manifestado de diversas formas, incluido el ostracismo social, los insultos, el rechazo y las repercusiones profesionales, como castigos relacionados con el trabajo o evaluaciones de desempeño injustas.
Domingo García afirmó: “La Ley Vanessa Guillén es un testimonio del poder de la acción colectiva y el compromiso de nuestra comunidad para garantizar que nuestros miembros del servicio estén seguros, respetados y protegidos. Esta ley es un paso crítico hacia el desmantelamiento de la cultura del silencio que ha permitido el acoso y la agresión sexual persistan dentro de las filas militares”. LULAC reconoce el progreso logrado con la sentencia de Cecily Aguilar, reconociéndolo como un hito esencial hacia la justicia para Vanessa Guillén y su familia. La organización reitera su dedicación a buscar justicia para las víctimas de agresión y acoso sexual dentro de las fuerzas armadas, abogando por la rendición de cuentas, la prevención y el cambio cultural.
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Acerca de LULAC
La Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC) es la organización voluntaria de derechos civiles más grande y antigua del país que empodera a los hispanoamericanos y construye comunidades latinas fuertes. Con sede en Washington, DC, con mas de 1.000 concilios en los Estados Unidos y Puerto Rico, los programas, servicios y defensa de LULAC abordan los problemas más importantes para los latinos, satisfaciendo las necesidades críticas de hoy y del futuro. Para obtener más información, visite www.LULAC.org .
